En archives of Internal Medicine Shubha V acaban de publicar en estea més de Julio, Application of “Less Is More” to Low Back Pain donde los autores realizan un estudio que confirma la iniciativa de la Alianza Nacional de Médicos, el proyecto titulado «Promoción de una buena administración en la práctica clínica», que desarrolló una lista de las 5 actividades principales en atención primaria cuyos cambios en la práctica podría conducir a una mayor calidad asistencial y un mejor uso de los limitados recursos clínicos . Uno de las 5 principales recomendaciones fue «no hagas pruebas de imagen para el lumbago durante las primeras 6 semanas a menos que estén presentes signos de alarma.»
Este artículo, según refieren en el abstract, presenta los datos que apoyan esta recomendación. Hicimos una revisión selectiva de la literatura, incluyendo revisiones recientes, guías, y comentarios, sobre beneficios y riesgos de las pruebas de imagen de rutina en el lumbago. En particular, se realizaron búsquedas en PubMed para revisiones sistemáticas o metaanálisis publicados en los últimos 5 años. También se evaluó el costo de las imágenes de la columna vertebral con datos de la Encuesta Nacional de Atención Médica Ambulatoria. Una revisión sistemática y meta-análisis de alta calidad se centró en los resultados clínicos en pacientes con lumbago y no encontró ninguna diferencia clínicamente significativa en el dolor o la función entre los que recibieron de inmediato imágenes de la columna lumbar frente a la atención habitual. Datos publicados también documentaron los daños asociados a la solicitud precipitada de pruebas imagen para el lumbago, incluyendo el «etiquetado» de los pacientes, seguimiento innecesario de hallazgos casuales, la exposición a la radiación, la cirugía innecesaria, y el costo significativo. No deben llevarse a cabo pruebas de imagen rutinariamente en la lumbalgia aguda. Ninguna prueba de imagen a los pacientes con lumbalgia aguda reducirá perjuicios y costos, sin afectar a los resultados clínicos.
Por otro lado, en el apartado de discusión, valoran que hay razones por las que médicos pueden seguir solicitando pruebas de imagen para la lumbalgia como las preocupaciones médico-legales, las preferencias de los pacientes, la presión asistencial (puede que sea más fácil ordenar una prueba de imagen que hablar de esta afección), y los incentivos financieros. En los ensayos controlados aleatorios, los pacientes con dolor lumbar expresaron más satisfacción cuando recibieron pruebas de imagen sencillas o complejas , aunque los resultados clínicos no fueron mejores que los de los pacientes que no se sometieron a la prueba de imagen.
¿Cómo pueden los médicos decir que no a la solicitud de la prueba de imágen y aún así mantener la relación médico-paciente, un alto nivel de satisfacción del paciente y la adherencia del paciente?, prosiguen reflesionando. Se responden diciendo que los datos de investigaciójn sugieren que validar el diagnóstico del paciente de «lumbago», la recopilación de datos adicionales sobre la razón por la que el paciente solicita la imagen, y la disponibilidad para adaptarse a la perspectiva del paciente puede resultar en una satisfacción excelente del paciente, a pesar de negar la solicitud de pruebas de imagen.
ELEMENTOS TEÓRICOS RELACIONADOS CON LA CLÍNICA DE MEDICINA DE FAMILIA DESDE UN ENFOQUE SISTÉMICO
COMENTARIOS TORTUGA
El paciente sobrediagnósticado, generalmente es sobretratado. El uso de recursos limitados y tecnología sanitarios debe ser sostenible individual y colectivamente por razones de sentido común y científicas como vemos en este estudio pero también por razones éticas. Los autores de este estudio proponen la empatía como prevención al problema de litigios, lo que además hace del debate radiografía sí-radiografía no un motivo para profundizar en la consulta dandola sentido a través de esa negociación de significados entre médico y paciente que permite profundizar en la relación médico paciente y da valor añadido a la especialidad de medicina de familia.